"Estamos analizando la forma de conseguir los recursos. Hoy no sabemos si vamos a participar", dice Carlos Sánchez, el presidente de Unión de Allen acerca del Argentino C versión 2010.
Los Magos se quedaron con el tercer Clausura al hilo de la Confluencia y demostraron que son de los mejores equipos de la zona, pero ni siquiera eso alcanza para encarar con firmeza un torneo deficitario como el más federal del país. "Si apelamos al sentido común, no tendríamos que participar, pero vamos a hacer hasta lo imposible por estar. La mayor presión es de los jugadores, ellos lo quieren jugar sí o sí", dice Sánchez con resignación.
En el Argentino pasado, Los Magos quedaron afuera en la tercera ronda a manos de Patagones y hasta ahí la dirigencia desembolsó alrededor de 60 mil pesos. "Ese es el dinero que tenemos que juntar, no podemos pensar en menos, a pesar de que no haremos muchas incorporaciones (serían dos) y que a nuestro estadio hay que hacerle arreglos mínimos", insistió el presidente.
Hay un dato esclarecedor: en la edición pasada, Unión gastó no menos de tres mil pesos cada vez que jugó de local y muchas veces ni siquiera llegó a amortizar ese gasto con las recaudaciones.
Saltense (campeón del Apertura) y Atlético Regina (segundo del Clausura) jugarán una final (a dos partidos y el primero sería el 13 de diciembre) para determinar quien acompañará al Mago. Los dirigentes del Albo dijeron varias veces que dirán presentes, pero sus rivales no son tan positivos.
En Saltense la crítica situación económica hace que el club no pueda arriesgarse a nada. Por eso su participación en el próximo Torneo del Interior está supeditada exclusivamente a que pueda completar con bastante tiempo de anticipación el presupuesto de unos 70 mil pesos, sólo para disputar la primera fase.
El tiempo es uno de sus peores rivales para completar el presupuesto porque si bien aún no está confirmado, el torneo comenzaría a jugarse a mediados de enero del 2010 por lo que el margen luego de la final será ínfimo.
"Estamos buscando recursos, hay algunos compromisos de palabra, pero hasta ahora no hemos podido cerrar nada. Nuestra intención es jugar, pero dependerá de si podemos juntar los 70 mil pesos. No vamos a hipotecar el club y tampoco haremos locuras con refuerzos, porque no podemos pagar un sueldo", reconoció Rodolfo Alvial, presidente de Saltense.
Como su estadio no cumple con las normas exigidas por el Consejo Federal, en caso de jugar, tendrá que hacerlo en otra cancha. Una opción sería la de Obrero Dique.
FUENTE: DIARIO RIO NEGRO.